Me gusta que una película que podría haber sido sobre political affairs sea sobre los problemas más precarios del ser humano: el miedo.
Miedo a hablar, a expresarse, a no poder, al poder, a decir lo que se debe o lo que no se debe...
Y que haya un sabio detrás de todo moviendo los hilos, diciendo "Tranquilo. Como si me lo estuvieras diciendo a mí."
Al final todo empieza por ahí. "Tranquilo."
"De a poco."
"Respirá."
Qué sería de nosotros si no tuviéramos ese pequeño relojito interno, la salvedad de un amigo que está tranquilo cerca, un Dios que nos espera y nos enseña a dar pasitos cortos...
Cada vez que lo veo a Geoffrey Rush en una película enloquezco, sobre todo después de Claroscuro.
Nunca ví un actor con ojos tan sabios y twisted a la vez!!! Está completamente loco, puede hacer papeles tan disímiles...
Me pregunto si siempre habrá tenido cara de viejo o de joven era joven.
Qué hombre que si bien no me atraería jamás, me gusta muchísimo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario