Con Bach

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Hace falta de esa música en el mundo
La que me enseñaste como mamá
La que rodea y no es estrella
La que te duerme y siempre está
La que es segura, fiel, dulzura
Es evidente tu impronta en mí
Porque mi estilo es así como el tuyo
El que se descubre pero es sutil
El que trae alegría pero se esconde
El que te da ganas de gritar
El que te emociona y se despliega
El que te invade como el mar

Pero tan materno, sin pedir nada
Todos tus hijos lo llevamos dentro
Nos educaste para saciar
Tu huella es la música del silencio
Y no la estridencia del azar

Y así tan finito vas garuando
Penetrando todo como un arenal
En el "vamos otra vez" de todos los días,
De la rutina
de mis ejercicios
En la paciencia de una mamá
Ahí es donde está mi sentido de madre
En esa tu forma de educar
De escuchar todo, de apacentarme
Como al resto de los hijos de tu panal.

Quién hubiera dicho que tu legado
Llegaba hasta ahí, profesora de piano
Que mis cuatro años,
Mis catorce años
Encerraban tan sutil forma de actuar.

Hoy me doy cuenta,
A mis veintiocho

Que hay tantas formas de educar.
Hay tantas formas de dar forma
Para que un niño sea un rosal.


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