9.7.11

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Irse a comprar un chocolate con pasas a las 11 de la noche de un día sábado en el que no pensás salir y encontrarte inusitadamente con una cola de gente detrás tuyo en el quiosco esperando que termines tu compra es como decirle abiertamente al mundo
"Sí, hoy NO voy a salir y voy a engordar deliberadamente cuarenta mil calorías mirando una película sola en mi casa. ¿Algún problema?"
El tema de vivir en un barrio transitado y lleno de luz a cualquier hora del día.
Por suerte uno de los esperantes iba con su perro y se compraba puchos, lo que pareciera indicar que estaba en la misma situación que yo pero con más bronquitis.


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3 comentarios:

Andres Anderes dijo...

Te robé el contador de visitas.
Y supongo que también te dejé una.
Saludos.

Anónimo dijo...

hola! me encantó tu blog, me llamo Edinei, y empezo a escribir en mi propio blog hace unos dias ...

bueno, saludos desde Brasil!
;)

Silvia dijo...

Gracias a todos! Edinei mucha suerte con tu emprendimiento. :)